lunes, 15 de diciembre de 2008

Ocejón de niebla y agua...

A ver. Poco a poco y después de volver del retiro espiritual yemení (con las consiguientes e inacabables celebraciones por haber llegado y estar bien, por ver a muchos viejos amigos, por retomar esa o aquella amistad, por tantas y tantas cosas que implican un trasnoche prolongado y con frecuencia agotador para la salud y el bolsillo) y haberlo celebrado como digo, vamos - voy - consiguiendo volver a dar una vuelta por el monte.
Las cascadas gemelas del Ocejón desde lejos

La última "hazaña" subir hace un par de semanas al Ocejón en un precioso día de niebla y agua (que venía, como diría forrest gump de todos los lados). El sendero era un río (aunque luego lo cruzaba otro casi infranqueable), la niebla tenía una cortina de agua con gotas en suspensión como si fuera "chiri-miri" (se escribe así?) y cuando ni una cosa ni la otra hubo lluvia de la de siempre. En resumen, agua por fuera y por dentro que viene bien pa'crecer. Por cierto, las fotos están hechas con el movil y no salen mal, verdad?
Agua que no has de beber dejala correr...

Y terminamos con un bonito enlace hasta que algún día aprenda a subir un video.
This post is dedicated to Balu for all his support (and compromise) in this and other adventures. Fenómeno!!

martes, 21 de octubre de 2008

I GP "Pico del Lobo"

Esto pasó el invierno pasado. Con la intención de alejarnos un poco de la vida nocturna que tanto nos ocupa quedamos un sábado para subir al Pico del Lobo(2.272 metros), el techo de Guadalajara y una de sus emblemáticas cumbres (no es el Ocejón pero también tiene su encanto; además es la frontera natural entre “nuestra” parte de meseta y el resto de Castilla). Bueno, el caso es que quedamos en subir al pico del Lobo y a la hora prevista, más o menos, nos encontrábamos para tomar café en Humanes el Primi, el Migue, el Lenon, el Balu, el Pérez y yo.

Después del café al coche y a armarnos de paciencia hasta llegar al puerto de la Quesera, base de nuestra expedición al Pico del Lobo. Los primeros kilómetros de la ascensión fueron cómodos. Es un camino facilillo y a pesar de la niebla que teníamos un bosquecillo y el propio puerto nos protegían del fuerte aire del norte que soplaba al empezar. Además de vez en cuando salía un poquito el sol que nos calentaba el cuerpo con lo que íbamos contentos. Las cosas se pusieron mucho más serias al llegar a la mesetilla desde la que se puede contemplar la provincia de Segovia y algo de Riaza, cuya estación de esquí quedaba a nuestros pies. Ahí el frío era más que notable. Un huracán del norte hacía que la sensación térmica fuera heladora con lo que no perdimos mucho tiempo y, después de echar un trago, salimos hacia la cumbre.

El primer repecho (duro de cojones) ya puso de manifiesto quién tenía más prisa que los demás. El amigo Pérez argumentando un muy justo: “Iñaki, lo que haya que hacer cuanto antes” empezó a correr hacia arriba. Espoleado por el frío y lo escaso de su equipación (chándal, sudadera y zapatillas en un día helador) empezó a sacar metros al resto del grupo desde el principio. Yo le acompañe un rato pero ante la posibilidad de un ataque al corazón por seguirlo opte por parar. Mientras el Balu trabajaba hablando por el móvil, el Lenon y el Migue hablaban de sus cosas y el Primi, espoleado en su amor propio porque acostumbra a subir el primero a los sitios, comenzó una larga caza al seguntino Alberto. El resto del grupo, una vez reunidos, admirábamos, en la distancia, la rápida subida de nuestros compañeros mientras no dejábamos de temblar por el frío que teníamos. “Toma que te dejo ropa”, “muchas gracias tío, estaba congelao”, “joder que frío, esto no es normal” eran los comentarios que íbamos haciendo mientras el Pérez y el Primi llegaban escapados a la cumbre seguidos por el Balu. Lo que iba a ser una agradable excursión terminó en una carrera hacia arriba y después otra hacia abajo por el frío. “Me he dicho ´que la congelación dure lo menos posible`”, apuntaba el Pérez en la cumbre, “dame el abrigo que llevas en la mochila que me jodo de frío”. Declaraciones de un campeón fortuito que nos dejó a todos estupefactos por la ligereza con la que se movió hacia arriba ese día. Incluso el segundo clasificado, el Primi Carlos, acostumbrado a correr cuando el terreno pica para arriba reconocía que “el Pérez había ido muy fino”. Una comida de hermandad en Majalrayo ponía punto final al I Gran Premio “Pico del Lobo” con el podio ya comentado: Pérez en primer lugar, el Primi el segundo y el Balu el tercero. La segunda edición de este GP tendrá tintes de desafío: dos generaciones se enfrentarán con un cabrito de por medio. El campeón Pérez y el Balu se medirán, si se ponen de acuerdo con las fechas, a los primos Tito y Rufino. Vencerá la resistencia de los veteranos o la fuerza de los jóvenes… Se admiten apuestas. Desde aquí prometemos informar de lo que ocurra.

sábado, 18 de octubre de 2008

En Monfragüe buitres negros...

Y buitres leonados, toros bravos, ciervos en plena berrea, garzas y cigüeñas, cerdos de pata negra y lomos embarrados... Todo esto y algo más encontramos el amigo Lenon y yo en una vuelta en bici por el Parque Nacional de Monfragüe, por cierto mucho más pequeño de lo que esperábamos ya que lo cruzamos en apenas dos días y luego circulamos por sus alrededores.

El primer día unimos, a ritmo tranquilo, Navalmoral de la Mata y Serrejón, 34 kilómetros para atravesar bonitas dehesas, encontrarnos con el Palacio de las Cabezas (donde Franco y D. Juan hablaron de la corona que hoy luce D. Juan Carlos), enfrentarnos por primera vez con los carteles de "ganado bravo", romper el cambio de la bici (afortunadamente en la cuesta del pueblo de Serrejón y mientras buscábamos alojamiento) y hacer un apaño para seguir tirando mientras decidíamos que hacer. La solución a nuestros problemas vino de la mano de Emilio, propietario de El Alcaudón (la casa rural - sin tv - en la que dormimos después de luchar con un ejército de moscas), que muy amablemente al día siguiente nos llevó a Sprint Sport, el mejor taller de bicis de Navalmoral. Allí conocimos a Fernando Urteaga López de Alda que nos dejó las bicis impecables y nos contó histórias de cuando fue seleccionador del equipo español de ciclismo en categoría de jóvenes. Una foto en la que posa en la Plaza Roja de Moscú con un equipo en el que figura un jovencísimo "Chaba" Jiménez prueba la verdad de sus palabras y confirman su vinculación con el ciclismo unos maillots firmados por el gran Indurain, Olano o Rominger.

Tras la reparación Emilio nos condujo de nuevo al Serrejón desde donde salíamos a medio día para recorrer 46 kilómetros, los que unen este pueblo con Torrejón el Rubio. Bonita etapa en la que por fin entramos en el Parque Nacional de Mongragüe. La primera parte discurre por caminos que atraviesan bonitos parajes de encinas y alcornoques. La segunda sigue la carretera que cruza el parque pasando por los miradores del Portillo del Tietar y la Higuera, donde vemos a varios pescadores; el mirador del Salto de Torrejón, paramos a comer un bocado, el mirador de las Tejadillas, al que no hacemos caso, y finalmente el popular Mirador Salto del Gitano, según cuenta la leyenda un gitano saltó, apoyado en su garrocha y acosado por la Guardia Civil, de un lado al otro del río Tajo desde las peñas que hay frente al mirador y que hoy son territorio de los buitres. Un salto improbable pero que dejó como herencia el nombre de este lugar en el que es fácil encontrar a ornitólogos y "pajareros" siguiendo el vuelo de las aves apoyados en sus imprescindibles prismáticos.
A pesar de la propietaria y sus pocas ganas de alojarnos acabamos durmiendo en la Posada El Arriero aunque el mejor sitio de este pueblo lo descubrimos más tarde. Es el Hotel Carvajal, para dormir, comer,desayunar y cenar. Nosotros hicimos esto último en una intensa velada gastronómica en la que no faltó el vino de la tierra (con abundante gaseosa) ni el orujo de hierbas (necesario colofón a cualquier ágape que se precie). El tercer día recorrimos 49 kilómetros. Los que unen Torrejón el Rubio y Romangordo en una etapa en la que alcanzamos el techo de la ruta: el puerto de Miravete (nombre que provoca la misma rima fácil que Albacete como bien pregonamos durante la ascensión). No fue una jornada fácil ya que a esta subida y los duros repechos del final unimos un almuerzo poco apropiado. Mediada la etapa hicimos un alto en el pueblo de Jaraicejo para dar cuenta de una ración de callos y unas cervezas. Minutos después de terminar de arrebañar con el pan la cacerola nos subimos a las bicicletas para dar pedales... a duras penas lo logramos y acabamos por llegar a Romangordo a primera hora de la tarde. Es este un pueblo que no tiene nada. Bueno, hay bar, que es donde echamos la tarde hablando de la vida e intentando explicarnos, como dicen en Al filo, "que fuerza nos hace continuar adelante, que determinación nos obliga a seguir pedaleando, de donde logramos la energía para subir a la bici después de tomar una ración de callos y dos cañas para empujarlos...". Preguntas para las que no encontramos respuesta... Puede que por la media docena de cervezas que llevábamos encima. Como no hay sitio para cenar y en el bar no tiene más que pipas ha de ser la dueña de la casa rural La Sartenilla, en la que dormimos, quién se encargue de proporcionarnos algo. Unos platos de queso, jamón, chorizo y lomo acaban con nuestro hambre y con la posibilidad de padecer la temida "torrenditis", peligrosa lesión que afecta cuando el atleta tiene déficit de productos porcinos en su dieta y que le causa un agotamiento instantáneo que le impide dar más pedales.

El cuarto y último día regresamos a Navalmoral en una entretenida etapa de 40 kilómetros. Primero bajamos hasta la Garganta de Descuernacabras, luego a subier hasta Villacañas de Tajo, vuelta a bajar hasta el Embalse de Valdecañas, vuelta a subir hasta Casas de Belvís (foto al castillo) y después de creernos perdidos acabar llegando a la puerta del taller de nuestro amigo Fernando. Punto final a una entretenida ruta circular que las personas que estén en forma y no les gusten los callos pueden hacer en un par de días deteniendose a dormir tan solo en Torrejón el Rubio.
Para terminar apuntaremos que, como canta Extremoduro en "Extrema y dura", a lo largo de estos días vimos mucho "puto pantano", "buitres negros", la central nuclear de Almaraz (responsable de "las bellotas radiactivas") y los "marranos" que prosperan a pesar de esta amenaza. De "tus mujeres nos la..." no hubo noticia. Habrá que repetir atentos sobre todo a esa posibilidad. Un abrazo a todos.
Ya hemos llegao! Vamos a comer!!

PD: Ignacio, que envidia jodío!!

miércoles, 8 de octubre de 2008

Fin de fiesta...

Bueno, pues ya estoy en casa. De hecho hace casi tres semanas que volví de mi periplo arabe pero antes viví un Fin de Fiesta espectacular en Israel, un país del que Jezulín diría: Á-cojonante! Y lo es.

Una de las cosas más reconfortantes de la vida es encontrarse con un amigo. Si esto pasa después de muucho tiempo sin ver a ninguno y en un país extranjero... pues mucho mejor. Además si el amigo es el gran Alberto Pérez de Sigüenza para que queremos más.
Nosotros nos encontramos en la estación de autobuses de Tel Aviv mientras que uno de los machacas me tenía retenido en la puerta sin dejarme pasar después de ver los sellos árabes que tenía en el pasaporte. Estaba discutiendo con el fulano cuando me dan una palmada en la espalda:
- Iñaki, la ostia!!
- Albertoooo Péreeeezzz!
- Que te pasa?
- El tipo este que no me deja pasar hasta que venga el jefe a dar el visto bueno al pasaporte... Eso y que es tontoelculo.
Cuando nos liberaron a perdernos por la ciudad, encontrar un hotelito con camita y a tomar unas cervezas para ponernos al día y "preparar" el viaje.
- Mañana por la mañana damos una vuelta por Tel Aviv y por la tarde nos vamos a Jerusalen...
- Vale. Otra cerveza...
- Si.
Tel Aviv es la ciudad más "avanzada", por decirlo de alguna manera, de Israel. Lo que es lo mismo que decir de todo oriente medio. La gente vive más relajada que en Jerusalen y viste como en cualquier ciudad de la costa de España, hay sex shops bien visibles en las calles principales, concursos de camisetas mojadas, bikinis en las playas, bares, pubs y discotecas. Además es el único sitio en el que los homosexuales pueden declararlo sin que los apedreen con lo que hay una colección notable de gays y lesbianas. Tel Aviv tiene también una de las mejores playas de Israel y el llamado "Museo de la Diáspora" que resume la historia del pueblo judío desde su punto de vista = hay que ver lo mal que se ha portado todo el mundo con nosotros ya que nos han echado de todos los sitios en los que hemos vivido, pero no os preocupeis amigos judios porque somos diferentes. Somos el pueblo elegido y, a pesar de nuestros pesares, seguimos vivos como pueblo mientras imperios que nos machacaron hace tiempo que duermen el sueño eterno y ahora, además, tenemos un país por mucho que le pese a media humanidad...

Después de visitar el museo, coger las maletas del hotel, problemillas en el control de una nueva estación y confundirnos de medio de transporte llegamos a Jerusalen.














Aunque llegamos tarde conseguimos habitación en el Hostal Feisal, un reducto de las causas perdidas frente a la puerta de Damasco donde nos dieron la bienvenida hablando de ETA.
- La primera vez que oí hablar de España, dijo el tipo de la recepción, fue cuando Carrero Blanco hizo boouummmm y salió volando. Je, je... estaba en el colegio y nos pusieron la noticia en la televisión. Aún recuerdo que el locutor dijo que "el plan terrorista era de una precisión diabólica", je, je... El coche saltó por encima de un hospital y cayó al otro lado...
Despues de este saludo salimos a conocer la ciudad antigua y a acojonarnos un poquito. Es de noche y los musulmanes, que ya han roto el ayuno diario, están todos en la calle de charla con los vecinos. Entre ellos, por parejas y apenas serparados por diez metros, policías y soldados israelíes controlan los movimientos del personal y se aseguran que los judíos ortodoxos que cruzan a toda prisa la parte musulmana de la ciudad antigua no tengan malos encuentros. La tensión se siente. Aunque más tarde te acostumbras a ello, la primera impresión es honda y lleva a pensar que el problema palestino-israelí no se va a arreglar nunca.
Y así de im-prezionados llegamos al Muro de las Lamentaciones, el lugar más sagrado para los judíos y en el que rezan con su peculiar estilo. Aquí nos asustamos otro poquito cuando los policías que han terminado su servicio corren - rifle al hombro - a agradecer a Dios el que sigan vivos apoyando su cabeza contra el Muro. Luego también te acostumbras, porque lo ves todos los días, pero la primera vez parece que corren a detener a alguién que puede ser tú por llevar el bigotillo árabe que llevas y que te está causando tantos problemas (hasta que me lo afeité y dejaron de pararme en todos los controles).

En Jerusalen hizimos muuucho turismo religioso. Vía Dolorosa arriba, Vía Dolorosa abajo... llegamos hasta la Iglesia del Santo Sepulcro, que concentra el lugar donde crucificaron y enterraron a Jesús, la Iglesia construida donde nacio la Virgen María, a la explanda de las Mezquitas (que está justo encima del Muro de los Judíos y donde no nos dejaron pasar por ser Ramadan), al barrio judío lleno de tipos con trencitas que les salen de las orejas, al Huerto de Getsemaní... en resumen, que peregrinamos a Tierra Santa haciendo turismo- turismo.
Después de alquilar un coche visitamos otros sitios: Masada, el Numancia de los judíos (pasó lo mismito que en Soria cuando llegaron los romanos), intentamos ahogarnos en el Mar Muerto sin conseguirlo, llegamos hasta Akko ("el único sitio donde me siento tranquilo", dijo el Pérez, "no hay soldados ni policías y hay gente normal por la calle") y de vuelta en Tel Aviv comprobamos lo bien que funciona la grua municipal que se llevó el coche que alquilamos en nuestras narices y sin hacer ruido... Sin hacer ruido la grua porque el triatleta Alpe les vió cuando arrancaba la grua con el coche encima y salió detrás de ellos gritando "It´s my caarrr!! Stop!", no le hicieron caso así que nos tocó ir a recogerlo, pagar la multa y celebrarlo. Una bonita despedida para decir adiós a Israel y volver a casa.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Museo friqui...

Lo mejor del Libano son las ciudades costeras, al menos para mi. Sidon, Biblos o Tiro ciudades con muuucha historia que ahora son un lugar tranquilo en el que relajarse un poquito. Playita, puerto con pescadores, algunas piedras antiguas a mano para hacer fotos, mucha historia y algun museo en el que flipar un rato.

Concretamente se trata del Museo de la vida acuatica y sobre la tierra con especies animales, vegetales y minerales de ambos mundos y esta en Sidon. Un buen dia un fulano al que le gustaba sumergirse en el mar empezo a coleccionar moluscos, despues paso a coger peces. Un poco mas tarde corrio el rumor por el puerto de que "Mohammed te compra los peces raros... y ni siquiera se los come!", asi que los pescadores le vendian lo que no colocaban en la lonja. un pariente, tan flipado como el, le paso su coleccion de minerales... Despues de mucho pensar se dijo: Co;o, voy a poner todo esto que tengo en el garaje en una habitacion grande y voy a cobrar entrada a la gente que quiera verlo. Dicho y hecho. Manos a la obra. Aprendio a disecar animales aunque le costo mucho hacerlo porque los peces no se dejan demasiado - las pruebas de sus practicas tambien pueden verse en el museo - pero lo logro y consiguio colocar todos los especimenes en grandes vitrinas con mas o menos acierto... Asi que hoy podemos contemplar peces mustios con una buena capa de polvo en sus escamas que te miran con unos ojos... lo bien que estaban ellos en el mar o, en su defecto, alimentando a un primo de mayor tama;o.

Y si los peces sobrecogen los animales terrestres dan pavor!! Creo que no hay mucha gente capaz de disecar un bicho y dejarlo con tan mal aspecto como el fulano del museo. En fin, una visita de esas de las que luego hay que recuperarse tomando una cervecita en alguna terraza (no hay muchas y son caras pero merece la pena) mientras se pone el sol.



Ale, a pasarlo bien.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

La ciudad no es para mi...

Al menos Beirut que es un lugar esquizofrenico! Aqui me siento como el gran Paco Matinez Soria en la capital. Esta ciudad es grande, muy grande, el trafico es un puto caos y los libaneses son grandes aficionados a tocar la bocina con lo que cualquier paseo por aqui es como asistir a un concierto de pito (el del coche!). Los autobuses no tienen ni pies ni cabeza y los taxistas, como ya sabemos, en cuanto te ven extranjero afilan la navaja para meterte un buen rejon con lo que si quieres el precio razonable tienes que esperar un monton hasta que das con uno al que le caes bien y te lleva en "service" (parando a coger gente por el camino) a donde quieres, mas o menos.
La parte nueva de la cuidad es como los outlet de las Rozas, o como Disneylandia - nuevos edificios que parecen de carton piedra - con pijos paseando en cochazos o comprando en magatiendas de marca.
La zona de los refugiados palestinos es como un barrio de VPO's de las que construyo Franco, mas o menos, ahora un tanto silenciosa por el dia por aquello del Ramadan. Y un paseo por la famosa "Linea Verde", la calle que separaba los barrios cristianos y musulmanes durante una de las guerras civiles y en la que se pegaban muchos tiros, es un paseo por una calle mas con algun edificio un poco machacado por los disparos. Heridas de la guerra que alguna se ve pero a las que la gente parece que no hace mucho caso.
Tambien me di una vuelta por el paseo maritimo, como darselo por Barcelona, por poner un ejemplo. Y todo esto con los coches venga a pitar, los libaneses que no me entienden un carajo cuando hablo en arabe - ni yo a ellos - y, eso si que hay que reconocerlo, algunas chicas guapisimas y superarregladas que van como modelos. Para mi lo mas destacado de esta ciudad de locos llena de scalestrix como los que habia en Madrid no hace mucho tiempo.
Ultimo apunte, aqui el mapa no vale para nada. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia y no hay manera de orientarse.
Un abrazo a todos y a pasarlo bien.

lunes, 1 de septiembre de 2008

Siempre hay un friqui a mano...

Afortunadamente, habria que a;adir. El de Tripoli se llama Ali Khawaji y me lo encontre al volver de comprar un timo de jabon tipico en la tienda que con una enorme sonrisa enga;an a los turistas. Esto ultimo me lo dijo despues el bueno de Ali entre otras muchas cosas mientras me hacia recorrer las calles de Tripoli a la carrera para ver todas las mezquitas y las iglesas dignas de verse en la parte antigua de la ciudad.
"Yo soy artista, hombre de teatro, ya sabes, en esto de ser guia voy por libre. El Ayuntamiento me ha dado una tarjeta de colaborador pero nada mas". "Antes venian mas turistas. Habia dias que tenia dos o tres grupos con 20 o 30 personas y me pasaba el dia ense;ando la ciudad. Ahora estoy contento si me encuentro cada dia con uno o dos turistas". "Eres espa;ol! Hombre que tal, que pasa, bienvenido a Tripoli. Yo conozco Espa;a, Costa del Sol, Almeria, Marbella, Toledo... es que me he pasado 20 a;os viviendo en Europa con mi mujer, que era holandesa, y trabajando en el teatro y peliculas". "Si, hasta que me separe de mi mujer y ella se quedo con la casa, el dinero y el coche y me tuve que volver aqui estuve viviendo en Holanda, Alemania, Suiza y Espa;a. Algun dia volvere, pero quiero hacer una pelicula aqui para volver con algo importante hecho. No exito, pero si un buen trabajo que retrate el Tripoli que yo quiero y me gusta ense;ar.
Por cierto, cuanto te han cobrado por el jabon?" (6 dolares). "Que robo, esta gente son unos ladrones, ven que yo te llevo al autentico taller de jabon de Tripoli. Es un buen amigo mio, esta gente de la tienda son unos mafiosos. A mi me han atacado dos veces por decir a los turistas que lo que venden no es jabon es basura. Si no saben hacerlo! No se dedican a esto!". Y me lleva al taller de su amigo donde venden el verdadero jabon hecho en casa con recetas traspasadas a traves de generaciones. Mas barato y con mejor pinta y como el tipo es muy amable y me da a mi que lo lleva claro con el negocio en el rincon en que esta instalado pues le compro mas jabon y ahora acarreo un kilo de jabon de Tripoli que no creo que gaste nunca.
Y volvemos a la calle. "Vamos a ver la tumba de mi tio. El tambien vivio muchos a;os en la Costa del Sol. Era rico y se murio de un infarto en Arabia Saudi. Cuando vivia me mandaba todos los meses 3.000 dolares pero desde que murio se acabo asi que si antes era yo el que invitaba a todo el mundo a cerveza ahora tengo que ir buscando a ver quien me paga una". "Y es que a mi no me compran. Lo han intentado los del jabon, para que les lleve turistas, pero yo me he negado. Por 10 dolares no quiero que mis amigos europeos y japoneses se lleven productos de mala calidad de mi ciudad que es lo mas importante ahora para mi. Por eso me han atacado. Hasta en la mezquita!".
Despues de criticar a los sirios que segun el han hecho que aumente la corrupcion en el pais y a Hizbollah, el partido de Allah, defender a los americanos, decir que echa de menos Europa, que la vida en Espa;a esta muy bien y que alli tiene a muchos amigos. Tras llevarme a la calle donde nacio y contarme otras muchas cosas y decr como mil veces "En el nombre de Allah, el clemente, el misericordioso" cada vez que entrabamos en una mezquita para demostrar a los que habia lo piadoso que era nos despedimos. "Yo ahora me voy a casa y despues un poco a la playa y es que como ahora empieza el ramadan me tengo que esconder durante el dia para fumar un cigarro o tomarme una cerveza".
Ale, a pasarlo bien.

viernes, 29 de agosto de 2008

28 dias en Siria

Hola a todos!! Ya he salido de Siria, donde no he podido escribir nada porque los blogs estan censurados y en los "internets" no podia acceder asi que aqui va un resumen rapido.

Uno de agosto. Con una resaca de qat bastante notable cogi un taxi compartido en Amman, Jordania, para ir a Damasco. En la frontera, tras dos horas de espera, consigo el visado (que estaba en manos de Allah, segun el poli que me toco en suerte). En Damasco primer encontronazo con los avispados taxistas sirios ("Todos son Ali Babas (chorizos)" me dijo uno, Y tu? "Yo solo medio Ali Baba"). Primer rejon y a un hotel caro porque segun el no habia otro en la ciudad. Bueenoo, que le vamos a hacer... ma;ana sera otro dia.

Damasco recuerda un monton a Sevilla, los Omeyas dejaron su huella en las dos ciudades y por momentos me parecia que estaba en Espa;a. Visitas turisticas de rigor y una extra;a experiencia en un hamman (donde no entendi nada pero habia un rollo muy raro y sali sin lavarme) y a la carretera. Un par de noches en un Monasterio Cristiano en medio de la nada, donde me encontre con el nieto de un insigne seguntino, Manolo "el Mayoma", fui a una misa nocturna en mitad de las monta;as que supongo seria algo asi lo que vivian los primeros cristianos y asisti a unas conferencias interreligiosas en las que tampoco entendi nada porque la traduccion simultanea era desastrosa. Por el camino hice mis primeras colegas, 3 rusas que estudiaban arabe, asi que por coincidir con ellas me fui a una ciudad llamada Homs. Lo mas destacable aqui son los hoteles tan cutres que hay si no quieres dejarte 100 dolares por noche. El primero daba asco... en el segundo me quedaba pegado a unas sabanas que no conocian el agua. Cuando le dije al fulano de la recepcion que me las cambiara puso cara de loco y me dijo que si queria lavarlas que las lavara. Fue lo que hice. Desde aqui, con mis nuevas amigas, a visitar el Castillo de los Caballeros, fortaleza cruzada inexpugnable que Saladino tomo haciendo un agujero en el suelo al mas puro estilo Gallardon.

De Homs a Hama, la ciudad de las norias de agua. Aunque ya no hacen falta para llevar agua a las casas y las mezquitas siguen funcionando como atraccion turistica y haciendo un ruido de mil demonios que es lo que mas llama la atencion. De aqui paseo en taxi con el gran Abu Mustafa (el unico conductor majete que me he encontrado y que me conto un monton de cosas de Siria, sus tres hijos y me hizo planes para futuros viajes) hasta Latakia pasando por las ciudades muertas bizantinas (un terremoto acabo con los habitantes y su prosperidad) ahora sumergidas en un mar de olivos y al Castillo de Saladino, en mitad de las monta;as y donde cortaron la roca a pico para poder montar un puente levadizo como los de las peliculas.

En Latakia eche una semana. Playita, visitas turisticas moderadas, una noche de marcha con un sirio loco (fumar una pipa de agua en una terraza mientras me ense;aba fotos suyas pegando tiros con un rifle) y unos whiskies con un nuevo colega canadiense llamado Will (Un consumado viajero con un punto de vista peculiar: "Si he estado en la India, los peores 7 meses de mi vida!" o "Pablo, al final esto de viajar solo es un co;azo y me cansa tanto que no tengo energia para visitar nada!!", me dijo cuando volviamos de intentar visitar los cutre-clubes locales en los que era un experto).
De Latakia a Alepo, ola de calor que llega y varios paseos por la ciudad turisteando en plan rapido mas una merienda en casa de un sirio que me cogio haciendo dedo en las monta;as. Buen rollo para volver a Damasco a visitar a nuevos-viejos amigos. Un intento de conseguir visado para Espa;a y una noche con un guitarrista de blues iraqui mas tarde vuelvo a la carretera para visitar Palmira donde un barbero cachondo me aconseja dejarme el bigote que ahora luzco. Son estas unas de las ruinas mas importantes del pais y cada a;o las visitan miles de espa;oles. El mismo dia que yo dos grupos de unos 30. De aqui a Deir Zor para ver otras dos ciudades antiguas que hoy no son mas que piedras tiradas por el suelo con mas o menos acierto = Mari y Dora Europos. Esta ultima en medio del desierto. Murallas y puertas imponentes, dentro poca cosa pero andando hasta el extremo este... el Eufrates! Casi un expejismo. Bajo como puedo saltando la muralla y a ba;arme con unos paisanos en uno de los rios mas importantes de la historia. Buen rollo con la gente del pueblo y dos jovenes que me encargan una esposa espa;ola para cuando vuelva. Tomo nota!

De aqui a la frontera turca para intentar mojarme los pies en el Tigris, otro rio con solera, que roza el pais al noreste. Cuando llegue a la ultima parada de autobus no daban credito que un tipo hubiera venido hasta aqui solo para ver esto. Afortunadamente di con un oficial de policia majo que organizo la puja de los taxistas para llevarme y el que gano me acerco a lo que queda de un puente bizantino que en su dia tuvo que ser impresionante pero del que ahora tan solo queda un arco. Al otro lado del rio Turquia y las torretas de vigilancia de su ejercito. Por aqui mejor no cruzar.

Solo queda un castillo: Qa'laa al Jabaar, en plena presa sobre el Eufrates. Por el camino me hago amigo de Hasan que me lleva a su casa, me da de comer, juego con sus hijos que meten los juguetes en la mochila para venirse conmigo a Espa;a y por la tarde me acerca hasta el castillo despues de "obligarme" a quedarme a dormir en su casa. Ultima charla en Siria sobre lo parecidos que somos cristianos y musulmanes, noche bajo las estrellas y por la ma;anica camino de Alepo para lavar la ropa, ver la de japoneses que viajan solos sin casi hablarse aunque coincidan en el hostal y coger un autobus para cruzar la frontera hacia el Libano. De nuevo problemas en el lado sirio.

-De que trabajas?

-Periodista (error!). A bajarse del autobus y volver a la comisaria a explicar que era en una radio de Guadalajara poniendo musica y que ahora estudio arabe para ver si encuentro un trabajo donde me paguen mas. La cosa cuela y, al contrario que una familia libanesa a la que no dejaron salir del pais y alli se quedaron en la frontera, alrededor de las maletas, la madre y los cuatro hijos sin saber que hacer. Yo me monto en el bus y entro en el Libano donde un amable funcionario me regala un mes de estancia sin tener que pagar los 20 dolares, mas o menos, que cuesta el sello por chapurrear el arabe. Ale, un abrazo a todos y a pasarlo bien.

PD: Hay que ver lo que se parecen muchos sirios a los espa;oles o lo que nos parecemos nosotros a ellos. Con bigote algunos a algunos taxistas les costaba creer que no fuera sirio o libanes. A la hora de cobrarme ya parecia que se habian convencido.

PD 2: Hay que ver lo guapas que son las mozas sirias... y lo inalcanzables para un humilde turista sin recursos.

PD 3: A lo largo y ancho del pais hay alguien que te esta observando, ademas de la policia oficial y la secreta: es el presidente Bachar el Asad cuyo retrato te acompa;a siempre para que no te sientas solo.