Hoy cogemos qat...

Para que los yemenies se pogan ciegos de qat alguien tiene que cogerlo de los arboles cada dia y llevarlo hasta los zocos. El otro dia me aplique, junto a varios profesionales, a esta labor. La cosa es sencilla. Vas al huerto de qat – hay muchos, pero es importante que vayas al tuyo porque sino te pueden volar la cabeza de un tiro– y arbol a arbol y rama a rama vas cogiendo los brotes tiernos que pones en una bolsa que llevas colgada abierta de la jambia. Cuando la bolsa esta mediada la cierras y a llenar otra. Los buenos hacen esto bien rapido. Saben que brotes coger, desde que altura de la rama y de que manera y consiguen pelar un arbol a buena velocidad. Aun asi el trabajo es lento y pesado. Hay que ir rama por rama y coger brote a brote. A veces se hace a puñados y otras hoja a hoja. De todas formas esta gente tiene un truco para que esto sea mas ameno... ir metiendose hojas en la boca según las van cogiendo asi todo tiene mejor color.
En los ultimos tiempos el cultivo de qat ha proliferado tanto que en muchos lugares ha sustituido a los arboles frutales, las verduras y el famoso cafe de moka yemeni. Hasta tal punto ha crecido esto que el gobierno anda preocupado porque la situacion puede llevar al pais hasta la hambruna. El qat mola pero no alimenta por lo que en la prensa se lee con cierta frecuencia que el gobierno trabaja en fomentar la vuelta a los cultivos tradicionales aunque hasta ahora con poco éxito. Esto es lógico. La demanda de qat es tremenda y un arbolito de estos da hasta cuatro cosechas al año mientras que el cafe solo da una, los frutales dos en el mejor de los casos y las verduras en funcion de las lluvias. Asi las cosas el paisano que tienen tierras lo tiene claro y se dedica al qat hasta hacerse millonario y poder casar a su media docena de vastagos.

Como podemos suponer, igual que hay muchas variedades de uvas para hacer vino hay muchas variedades de qat. Esta el pata negra, Hamdani (precisamente el que estamos cogiendo en las fotos) y Shami, el bueno, llamado Gaili y que crece en el norte, el regular, el que solo relaja, el que siempre te sienta bien y relaja mientras te da la risa, Ansi, tambien hay malo que es el que no hace nada. Bueno, con este ultimo lo que consigues es llenarte la boca de hojas y escupir despues durante horas trocitos verdes ya que en un intento de que eso te sepa a algo has pulverizado el qat a mordiscos.

La calidad tambien varia un poco segun de donde se coja. El de la parte de abajo de los arboles parece que es peor que el de la parte media y este un poco inferior al de la parte superior. Las hojas de la parte baja son pequeñas y vienen acompañadas de mucha morralla por lo que de una buena bolsa solo masticas una pequeña parte. En la parte media hay brotes tiernos que a mi son los que mas me gustan y en una bolsa de aqui hay bastante trabajo por lo que si vas a una boda es la cantidad y calidad recomendable. En la parte de arriba parece que esta lo mejor, el qat que mastican los seikjs (los jefes de las tribus), y se arranca a lo bestia partiendo las ramas enteras y luego el fulano se entretiene en ir cogiendo las hojitas pequeñas y tiernas que tienen bastante sustancia. En las bodas esto es lo que mastica la familia, los musicos (para que esten contentos y se esmeren) y los enchufados a los que les sueltan el manojo delante y pueden apartar el que han comprado para darse un homenaje con este. En un próximo capitulo hablamos de como masticarlo porque tiene su miga. Un abrazo y a recuperarse de la resaca medieval!!
Me despido con esta foto en plena operacion con la cuadrilla de Juan Valdes Yemen, cafe no tendremos pero que qat!!!