Vista general de Thula desde arriba.
Esta gente no come, devora!!
Me ha costado un mes (y es que ya llevo un mes en Yemen que se me ha pasado volando) pero ya he conseguido salir de Sana'a. Este fin de semana, después de marear la perdiz con varios planes, acabé yendo a Thula con mi profe y sus colegas del otro curro que tiene. Un bonito viaje en autobús - con parada para desayunar incluida - en el que jugamos al Trivial del Corán:
- Iah Shabab (a ver jóvenes), como se llamaba el compañero del profeta que...? Y todos a discutir si era este o aquel y como se llamaba. Un juego divertido hasta cierto punto si entiendes algo de lo que dicen. Yo no entendía nada así que me eché una siestecita hasta que llegamos.
En Thula todo es de piedra. Las casas, que parecen fortalezas con las primeras ventanas a varios metros de altura, las calles y las cisternas excavadas en la roca en las que antiguamente se recogía el agua que bebían los vecinos. Nada más llegar un buen número de niños rodean al forastero saludando en diferentes idiomas hasta que dan con el del viajero. Pueden hablar en inglés, francés, italiano, alemán, japones, español... y algún fenómeno en alguna otra lengua. Idiomas que conocen de su trato con los muchos turistas que vienen.
Hasta arriba subimos para ver el castillo de este pueblo.
Lo más chulo aquí es subir hasta una fortaleza que hay en la cumbre del pico bajo el que se levanta la ciudad. Antes de hacerlo hay que pasar por taquilla pero merece la pena. Las vistas son espectaculares y, según cuentan, la fortaleza que aquí se levantaba no fue conquistada nunca. No me extraña. El camino hacia arriba es estrecho y agotador además de facilmente defendible. Por lo visto este pueblo tuvo su importancia durante la ocupación turca aunque según las versiones el fuerte era turco o anti-turco (a mi en la excursión me contaron las dos cosas). Como no lo se, que cada uno se quede con la versión que más le guste, es decir, un baluarte de la libertad ante el imperio Otomano o un milagro de arquitectura defensiva que levantaron los turcos. Arriba hay también cisternas para el agua y huecos que servían de granero y aún quedan restos de las murallas que rodeaban la cumbre y alguna que otra torre de vigilancia. Desde aquí se domina el valle en el que se ven las terrazas agrícolas en las que trabajan como en la edad media = con burro, arado y mucha paciencia.
Una excursión con yemenis es como estar de vacaciones con la familia real con los paparazzis detrás todo el día. Hay que ver lo que les gustan las fotos a esta gente que no duda en posar a la mínima: primero solo, luego contigo, Mohamed vamos a hacernos una foto ahí, Pablo ponte tu también... Esto hasta que llega la hora de comer y la consiguiente sesión de qat que no faltó en esta excursión.
Esta gente no come, devora!!
Después de devorar varias cazuelas de salta y comernos con las manos varios pollos cogimos el bus para ir a casa de alguién que debía conocer a no se quién y cuya casa ocupamos para masticar qat. Un nuevo ejemplo de la hospitalidad de esta gente. Por ejemplo, allí nos presentamos unos 15 y, ningún problema, "subir para arriba al mafragh que ahora subo yo", parece que decía el propietario mientras nos daba la mano a todos en la puerta de la casa. Durante el rato que estuvimos allí otros vecinos se fueron sumando al grupo. Llegaban, saludaban a todos desde la puerta de la habitación y empezaban a estrechar manos y dar besos según el grado de conocimiento. Cuando nos marchamos, había que volver a Sana'a y el chofer ya tenía una buena bola de qat en la boca, aquello estaba a tope. En resumen, que si alguien viene a Yemen no puede dejar de visitar Thula. Seguro que le recuerda algo a Albarracín.
Parte de los alegres excursionistas antes de empezar la ascensión. El de amarillo con gorra, que parece un jugador de voleivol, es mi profe.
4 comentarios:
Uff, egtamos de fiestas, akí en Arre, jo, eg que no sé yo, porque egto de ser independiente da folores de kabeza. Akí no le damos al qat, pero darle al pimple..., uf, no sé yo.
For cierto, eso de Thula, mola; pero lo de las chicas, para nada. Están siempre con frío, no?
Fesos,
Er Javi y la Amaite
Que envidia me das, me pongo verde cada vez que saco un rato y leo lo que haces. Un beso,
Susana
Que envidia me das, me pongo verde cada vez que saco un rato y leo lo que haces. Un beso,
Susana
me ha encantado verte en la foto, estas muy guapo.Amparo
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